El diputado opositor orureño Franz Choque Ulloa calificó de “irónico” que
un presidente que ha eliminado la independencia de poderes y ha usado al
Legislativo como instrumento de judicialización de la oposición, condene al
Congreso paraguayo por la destitución constitucional del presidente Fernando
Lugo.
La oposición boliviana
criticó las reacciones del presidente Evo Morales, en rechazo a la destitución
del primer mandatario paraguayo Fernando Lugo, suspendido por el Legislativo de
su país, y aseguró que al presidente cocalero “le falta moral” para hablar de
“golpe de estado” o para criticar la destitución de autoridades electas.
El diputado opositor orureño
Franz Choque Ulloa calificó de “irónico” que un presidente que ha eliminado la
independencia de poderes y ha usado al Legislativo como instrumento de
judicialización de la oposición, condene al Congreso paraguayo por la
destitución constitucional del presidente Fernando Lugo.
“En Bolivia el
Ejecutivo ha usado su mayoría parlamentaria para travestir al Legislativo y
convertirlo en un complaciente pelele que renunció a sus facultades y aprobó
leyes que le dieron (a Morales) el control de jueces y fiscales con los que permanentemente
da “golpe de estado” a gobernadores y alcaldes de regiones opositoras o su intención
de destituir a parlamentarios de oposición”, sostuvo.
El legislador saludó
que en Sudamérica existan todavía estados donde el órgano Legislativo es el
primer poder y donde el órgano Judicial no es una dependencia del Ejecutivo,
haciendo posible el control de constitucionalidad sobre las acciones
presidenciales.
“Morales dice que lo
de Lugo es un golpe a la democracia y nosotros le recordamos que para eso
tienen los estados democráticos poderes independientes con facultades
constitucionales; para que cuando el gobernante empiece a usar su mandato
contra su propio pueblo, el Primer Poder del Estado lo destituya si
corresponde”, señaló.
Agregó que a quienes
están acostumbrados a gobernar sin la fiscalización y regulación de contrapesos,
en alusión a Morales y su colega venezolano Hugo Chávez, “les da espanto” ver
funcionar una “verdadera democracia”.
“Es comprensible que
algunos autócratas del vecindario, que se creen intocables, vean con
preocupación lo que sucede en una verdadera democracia y desconozcan esos mecanismos
de regulación propios de estados con equilibrio de poderes y contrapesos, ojalá
esto les enseñe que la democracia no es un cheque en blanco”, agregó.
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